Mariano Yrigoyen estaba en su día libre y no dudó en ingresar al mar para salvar a una señora con sus dos hijos.
Mariano Yrigoyen reparte sus días del año entre España y Argentina. Más específicamente entre Alcudia y Claromecó, donde en ambos lugares trabaja de guardavidas. Y como ya es sabido, la calidad y profesionalismo de los servidores públicos de playa de estos lugares es más que probado.
Yrigoyen estaba en su día libre, trabaja en un complejo de piletas en Alcudia, y decidió ir a pasar la jornada a la playa de Mallorca, a unos diez kilómetros. En realidad no era originalmente su franco, pero lo cambió con un compañero, y hasta allí fue en compañía de su novia Marina Arias.
El instinto de guardavidas no se pierde nunca para quienes abrazan la profesión con el alma, como el caso de Mariano. Tras un baño en el mar y mientras se encontraba tomando mate, observó que una señora con sus dos hijos no hacía pie. Atento como siempre, ya había visto que eran dos chicos chiquitos porque los vio bajar, es más, vio también que uno de ellos tenía una tabla.
Mariano no dudó un instante, sin elementos de ningún tipo y sólo, se internó en el mar y logró contener a las tres personas. Luchó para mantenerlos a flote, hasta que llegaron los guardavidas oficiales del lugar y efectuaron el rescate correspondiente. Yrigoyen supo enseguida que la clave de todo rescate para que sea exitoso es llegar lo más rápido posible, y eso fue lo que hizo. Sin esperar nada, entró al mar y procedió.
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